domingo, 5 de junio de 2011

Decadencia del imperio visigodo, años 683 al 711

Invasión Musulmana, año 90 de la Égira.Fue ocupada por Musá ibn Nozayr en nombre de los Meruanos, y por Tariq, hijo de Abd Allah, hijo de Wanmou, de la tribu Zeneta, al que acompañaban las tribus berebere.
Al Idrisi (ocupación de Algeciras)




Durante estos años, se suceden diferentes conflictos entre los visigodos, llevándose a cabo el desembarco en Gibraltar de tropas musulmanas, 7000 hombres, casi todos beréberes bajo el mando de Tarij ben Ziyad, uno de los generales de Musá ibn Nosayr (el moro Muza), cuya ayuda había sido solicitada por los partidarios de Akhíla duque de la Tarraconense, en los conflictos con Rodrigo duque de la Bética, elegido rey por los nobles en contra de los partidarios del hijo de Witiza, que no aceptaban esta elección.
Los musulmanes sin embargo, al comprobar con la facilidad que derrotaron a los visigodos en la batalla de la Laguna de la Janda, desarrollada entre los días 19 al 26 de Agosto (Guadalete 711), convirtieron la ayuda inicial en invasión, fortaleciendo su ejército con otros 5.000 hombres, enviados por Musá ibn Nusayr para proseguir la lucha contra los visigodos.
Durante los pocos años que duro la conquista de la Hispania visigoda por los musulmanes y los muchos que duro la reconquista, la parte norte de Jálama se convierte en zona muy poco poblada, principalmente de paso, con pequeñas fortificaciones musulmanas en los puntos estratégicos de la sierra: fortaleza de Jálama y castillo de Eljas.
Al mismo tiempo que surgen los despoblados, estas tierras se convierten en reductos de malhechores que se sitúan en las zonas agrestes de paso, “Puerto de Ladrones,” conocido actualmente por Puerto Viejo.
Cercano a este puerto, la toponimia refleje el paso por estas tierras de la dominación musulmana, recordándonos aquella época con el orónimo Canchal de los Moros, en cuyo entorno las leyendas sitúan cuevas secretas y tesoros ocultos.
Detrás de las pequeñas fortificaciones en la Sierra de Gata, la transierra está protegida por una segunda línea: Trevejo, Milana, San Juan de Máscoras y Almenara.
Ruinas del castillo de Trevejo





Aunque al norte de la sierra los despoblados son los que predominan en el territorio, con pequeños asentamientos en zonas cercanas en la hoy frontera portuguesa y también en el rebollar, gracias a una agricultura de subsistencia, no existiendo apenas vestigios del paso de los musulmanes; en cambio en el sur, la agricultura recibe un nuevo impulso con la experiencia musulmana en temas agrícolas y en técnicas de regadío, así como por la introducción de árboles frutales como el limonero, el granado, el membrillero etc... etc...
Las técnicas para cultivos agrícolas están recogidas en diversos tratados, en los cuales se describe la forma de llevar a cabo las siembras para una mejor y mayor producción. “Se ha de sembrar el trigo en la tierra buena y la cebada en la mediana y las habas y los garbanzos en la tierra húmeda. Las legumbres atemperan la tierra porque tienen fuera cortas raíces: entre los garbanzos, las vezas, las lentejas y las hierbas dañan la tierra y no se han de sembrar más de cinco semillas en un palmo, hasta siete de trigo y de cebada de siete a nueve y de habas de cuatro a siete. Y hay que sembrar la tierra fría más intensamente que la caliente. Y quien quiera hacer barbecho que lo hagan cuando los días son iguales que las noches y cuando are la tierra que la are dos ó tres veces y que el surco sea grande, que remueva bien la tierra y que deshaga los terrones. Y quien quiera sembrar lentejas, que las frote bien con estiércol de vaca seco: así nacerán más rápidamente y harán más grano”. Ibn Wafid.
Mientras al sur de la sierra las tierras cultivadas muestran un desarrollo importante, al norte, más allá de los despoblados, siguen las incursiones contra los reyes cristianos del reino de León.
A la llegada de al-Mansur al poder, las razzias por toda la península se hacen cada vez más frecuentes y sangrientas.
Pocas son las referencias que sobre el ataque a Santiago existen en las fuentes de los historiadores de la época.
Ibn Khaldum, nos describe el acontecimiento muy escuetamente. “Habiéndose sublevado de nuevo Bermudo, Almanzor marcho contra Santiago, cerca de la costa de Galicia. Esta ciudad es una peregrinación de los cristianos y en ella se encuentra el sepulcro del Apóstol Santiago.”
Esta campaña, según los cronistas de la época, se debió al descontento de los condes de Galicia contra Bermudo, circunstancia aprovechada por Almanzor para llevar a cabo su cuadragésima octava campaña, ya que según Al Makkari, “ningún príncipe islamita se había internado en aquel país, por lo arduo de su entrada, lo escabroso del terreno y su lejanía.”
A un manuscrito de Al Makkari se deben la mayor parte de los detalles de esta campaña, traducidos por Romey en su Historia de España.
Durante el verano del año 997, la montaña de Jálama, parece ser, fue testigo mudo del impresionante despliegue de fuerzas que a través del término del actual Navasfrías, sigue su camino por los despoblados del norte de la sierra, o tierra de nadie, hacia Compostela.
Almanzor, el día 3 de Julio, al frente de un gran ejercito de caballería, sale de Córdoba para dirigirse a los campos de Badajoz, aumentando el número de jinetes con las fuerzas de los condes tributarios de los musulmanes y descontentos con el Rey Leones, que se le van agregando a medida que avanzan en su recorrido, cruzando Medina Qawriya (Coria) y avanzando hacia el norte por la parte del actual Cilleros, Trevejo y Villamiel, para franquear la sierra por las laderas de Jálama, cruzando los campos de Navasfrías en dirección hacia Medina Galicia (Viseu), posiblemente utilizando la calzada romana de Celorico Da Beira, Viseu, hasta llegar a Bortkal ( Oporto ), donde se les unen las tropas de infantería que habían viajado por mar, destruyendo en su avance todo lo que encuentran a su paso, sufriendo especialmente esta destrucción un lugar de Schant Yacub (posiblemente Padrón), hasta que el día 10 de Agosto entra en Santiago y arrasa la ciudad llevándose las campanas del templo del Apóstol y las puertas de la catedral.
Después del ataque a Santiago, siguió el ejercito hasta la península de Mayanca, formada por las rías de la Coruña y Betanzos, país nunca pisado por planta musulmana, donde atascada la caballería, Almanzor emprende la retirada hacia los territorios de los Condes aliados, en donde al llegar a las cercanías de Ciudad Rodrigo, mandó distribuir al ejército, incluyendo los condes, el botín de la campaña.
Según Al Makkari y Rodrigo de Toledo, Almanzor mando que las campanas del templo del Apóstol, fuesen trasladadas a hombros por los cautivos cristianos hasta Córdoba, mandando colgarlas en la mezquita como trofeo que recordase su victoria; siendo utilizadas como lámparas.
Refiriéndose a esta campaña, Ibn Kaldun afirma que Almanzor hizo transportar las puertas del templo a Córdoba y las hizo colocar en la azotea de la mezquita.
Fernando I de Castilla y León, lleva a cabo la ocupación de las tierras del sur del Duero en los años 1035 – 1065, conquistando todo el territorio situado al norte del Tajo.
Años más tarde, en el año 1086, los almorávides bajo el mando de Yusuf ibn Tasfin derrotan en Sagrajas ( Zalaca ) a las huestes del rey castellanoleonés Alfonso VI, que estaban bajo el mando de Alvar Fáñez, teniendo que retroceder hasta el río Mondego.


Creación del reino de Portugal.


En el año 1097, el rey leones lleva a cabo la creación y donación del condado de Portucale.
Su origen tiene lugar en Portus Cale, pueblo ribereño en la desembocadura del río Duero.
El itinerario de Antonino en la vía XVI, indica en el paso de la calzada Bracara- Scallabis -Olisippone, sobre el Durius, el poblamiento Calem en la milla XXXV.
La crónica del obispo Idacio, concluida en el año 469, cita ya “Portucale locum”.
Este condado, cedido por Alfonso VI a su hija Teresa, casada con Enrique de Borgoña, estaba situado entre el río Miño y Santarém.
A la muerte de Alfonso VI, Enrique de Borgoña se declara señor de todo Portugal. Esto sería el comienzo de lo que años más tarde llevaría a cabo su hijo Alfonso Enriques, encabezando un movimiento independentista y asumiendo la titularidad como Rey de Portugal, aclamado como tal por sus soldados después de la batalla en los campos de Ourique contra los moros el día 25 de Junio de 1139, proclamado en 1142 por las “Cortes de Lamego“y ratificado por el pueblo en la iglesia de Santa María de Almocave ante el procurador general Lorenzo Viegas.
Alfonso VII, rey de Castilla-León, y Alfonso Enriques, firman el tratado de Zamora el 05 – 10 - 1143, reconociendo Alfonso VII a Alfonso Enriques como rey de Portugal ante el cardenal Guido de Vico, legado del papa Inocencio II.
Con la concesión del señorío de Astorga a Alfonso I, este queda obligado como vasallo del rey castellanoleonés.
En el mes de Noviembre, Alfonso Enriques se ofrece como vasallo al Papa, pagando cuatro onzas de oro anuales; pero no es hasta 1176 cuando Alejandro III reconoce Portugal como Santa Sede, confirmando así a Portugal como reino independiente; esto añadiría nuevos conflictos y muy graves durante muchos años para todos los habitantes de la frontera.

Sierra de las Mezas-frontera con Portugal


Órdenes militares. San Julián del Perero.(Pereiro)



Haec est institutio Militiae Pererii. Esta es la institución de la Milicia del Perero.
Con estas palabras, da comienzo en el libro hallado en Santa Maria de Alcobaza, la narración de la fundación de la Orden Militar del Perero.
Frey Alonso de Torres y Tapia, hace un relato pormenorizado en la obra Crónica de la Orden De Alcántara, de la vida de estos monjes guerreros desde sus inicios en San Julián del Perero.
En Septiembre del año 1156, según se desprende de este relato, es el principio de la fundación de la Orden del Perero por caballeros salmantinos en la ermita de San Julián del Perero, situada en la ribera del Côa, entre Sabugal y Ciudad Rodrigo, en el termino de Vila Nova, hoy Cinco Vilas, aunque puede no haberse hecho efectiva esta fundación hasta final de 1157 ó comienzos de 1158.
Primeramente sus componentes observaron la regla de San Benito como hermandad monástica durante la construcción del fuerte, y aunque su fundación fue llevada a cabo por el Obispo de Salamanca D. Ordoño, dándole a D. Suero y sus compañeros las reglas y estatutos del Cister, no sería hasta años más tarde cuando acatarían esta regla.
Fernando II, rey leones, repuebla Ciudad Rodrigo y le concede fueros, creando la diócesis civitatense el 13/02/1161.
En Enero de 1174, el Rey hace donación a San Julián del Perero y al Prior D. Gómez y sus Freires, de Raigada y de la Granja del Perero, confirmándolo a todos sus sucesores y señalándole como primer fundador de esta casa, sin que aparezca aún el titulo de Maestre, como se denomina a los jefes de las Ordenes Militares pertenecientes al Cister.
Con estas donaciones se comienza a crear un espacio que limita las ansias expansionistas del Rey de Portugal en el Reino de León, al mismo tiempo que se refuerza a la Orden del Perero para luchar con más eficacia en el frente para cuyo fin se había creado y que jugaría un papel esencial en la reconquista de la transierra.
En 1190, pasan a acatar las reglas del Cister, fundado por Roberto de Molesme en el cenobio de Citeaux en 1098 y puesto bajo la protección de la santa sede por Pascual II con la concesión del “privilegio romano” el 19/10/1100.
El hábito y vestido de los Freires Caballeros y Clérigos de la Orden del Perero, así como sus armas, tienen una ligera variación con el acatamiento de las reglas del Cister.
“El vestido de los Freyles Caballeros siempre fue corto, acomodado al exercicio de la guerra, pero religioso, porque traían unas túnicas que llamaban sayas largas hasta el tobillo, sobre estas caía el escapulario, y cuando salían fuera del convento cubrían uno y otro con las capas que llamaban tabardos. De qué color fuese todo esto no consta. Más tarde cuando Benedicto XIII les hizo favor de que dexasen la capilla, y en lugar de ella traxesen la Cruz, el color era conforme al de los monjes del Cister, las túnicas o sayas blancas, el escapulario, capilla y las capas o tabardos negro, que de este son las que los monjes llevan cuando andan fuera de sus conventos sin cogullas.
En sus armas figura un peral silvestre pardo sin hojas con las raíces descubiertas en campo de oro, y corriendo los tiempos por la unión y hermandad con la Orden de Calatrava, añadió las travas y después la cruz verde por la mudanza del habito”.
Su primer prior fue Suero Fernández Barrientos 1156 -1174.
El día 29 de Diciembre de 1177, Alejandro III reconoce la orden en bula papal, ratificada nuevamente por Lucio III mediante bula papal el 4 de abril de 1183, apareciendo por primera vez el nombre de maestre para denominar al jefe de la orden (Gómez Fernández) y eximiendo a los del Perero de la jurisdicción episcopal.
Inocencio III ratifica en bula papal a los del Perero el 16 de Julio de 1205 en Roma los derechos concedidos por Lucio III, y el 31 de Marzo de 1207 en Lateran les concede la provisión de iglesias parroquiales; hecho reafirmado años más tarde con el reconocimiento de varias iglesias como posesiones de la Orden de Alcántara por el papa Gregorio IX.
En el año 1213, Alfonso IX rey leones, conquista Alcántara, encomendando su defensa en 1214 a la Orden de Calatrava, pero debido a las dificultades de ésta para luchar en varios frentes, el rey concede Alcántara a la Orden Sanjulianista el 16 de Julio del año 1218, la cual traslada su sede a esta villa, denominándose en adelante Orden de Alcántara y pasando San Julián del Perero a ser una encomienda de la Orden.
“En 1219 estando el Rey de León Alfonso IX en Ciudad Rodrigo, y habiendo sido electo Maestre D. Frey García Sánchez, a la muerte de Nuño Fernández, este se acerco con otros caballeros a besar la mano al Rey, y recibir de El el pendón de su Orden, haciéndole entonces el Rey merced del Lugar de Navasfrías, termino de Sabugal, al Maestre y Orden del Perero y Alcántara, señalándose por propio una legua en contorno, “leguam unam in circuitum” con sus pastos, fuentes, montes, prados, aguas, entradas y salidas, y lo demás todo que le podía pertenecer.
Ciudad Rodrigo 16 de Julio de 1219”.
En Mayo de 1223, Diego García Sánchez concede un fuero breve a sus pobladores (hoy día se desconoce su contenido).
“A proporción que adelantaban la conquista las victoriosas armas de León, sus ya poderosos reyes, que unían a la suprema autoridad de jefes la consideración de compañeros, concedían a la nobleza, Órdenes Militares y ciudades realengas, dándoles fueros con que se gobernasen, los términos redondos, cuyos límites no ha borrado el tiempo, con el generoso intento de que cultivándolos se estableciese en sus extendidos páramos una numerosa y rica población, que defendiese sus frontera y llevase la guerra fuera de ellas, pactos y condiciones de la constitución feudal generalmente observada en aquel tiempo, que desempeñaron exactamente”.
Este alegato hecho por D. Vicente Paíno, ilustrado extremeño del siglo XVIII, en la Adicción a la exposición de la provincia de Extremadura en el expediente de concordia, nos da una idea del fin con el que se llevo a cabo la repoblación de los terrenos conquistados, que aunque en un principio sirvió para asegurar los territorios al sur de la sierra y buscar la prosperidad de sus habitantes, los privilegios de los señoríos, de las Ordenes Militares y especialmente del Honrado Concejo de la Mesta, se convertirían en una pesada losa para el desarrollo de la provincia de Extremadura y sus habitantes, como también denuncia en este expediente el mismo Paíno.
Con los concordatos de 1193 y 1223, quedan fijados los límites de las diócesis de Coria y Ciudad Rodrigo, pasando a la diócesis civitatense los pueblos de Trevejo, Villamiel, Eljas, San Martín de Trevejo, Descargamaría y Robledillo de Gata.
Ante las quejas del Maestre García Sánchez por las diferencias que la Orden mantenía con los vecinos de Sabugal sobre los términos de Navasfrías, Alfonso IX confirma su donación y términos en Sabugal el día 10 de Octubre de 1226. En este mismo documento confirma la donación y términos de Milana, en el que también existían esas mismas diferencias con los vecinos de Coria; en ambos casos esta confirmación por el Rey se hizo a petición del Maestre.
Debido a la pertenencia de Navasfrías al obispado de Ciudad Rodrigo y jurídicamente a la Orden de Alcántara, obispado de Coria, surgen desavenencias entre ellos en la percepción del diezmo, al no respetar a los del Perero la eximente de la jurisdicción episcopal, llegando a un acuerdo el obispo de Ciudad Rodrigo, Miguel, en 1227, con el Maestre, por el cual, el Obispado y el Cabildo de la Catedral reciben una tercia de todos los diezmos de Navasfrías. “Conocida cosa sea a todos, así presentes como por venir, que yo Martín, por la gracia de Dios Obispo de Ciudad Rodrigo, en uno con el Deán y Capitulo de la misma Ciudad, por razón de amor y paz hacemos tal composición con el Maestre y Freyles de Alcántara y del Perero: que nos den la tercera parte de todos los diezmos de Navasfrías y de todas las poblaciones nuevas hechas hasta aquí; ó que hicieren adelante en nuestro Obispado fielmente y sin fraude excepto las primicias.---quod dent nobis tertiam partem ómnium decimarum de Navis frigidis, et de ómnibus aliis populationibus novis in Episcopatu nostro factis, vel faciendis bona fide et sine fraude”.
Sin embargo el Obispado de Coria no llega a acuerdo y sigue con sus litigios y desacuerdos con la Orden.
El 18 de Diciembre de 1228, el Rey confirma a los vecinos de Navasfrías el fuero que anteriormente les había dado el Maestre D. García Sánchez.
El pueblo de Navasfrías, situado en la cara norte de la sierra de Gata, estuvo siempre muy ligado al Concejo de Sabugal en los aconteceres y vaivenes de la frontera, pero formando parte de la historia medieval de la transierra extremeña, dada su pertenencia a la Orden de Alcántara y al termino territorial de la Alta Extremadura.
El día 15 de Noviembre de 1227, Alfonso IX señala los límites del alfoz de Salvaleón, y posteriormente Fernando III confirma dichos términos el día 2 de Abril de1231 en Sabugal, delimitando su término “por Eljas hacia arriba hasta el Puerto de Ladrones, según separa con Navasfrías por aguas vertientes y después separa el mismo pueblo con Sabugal por cima de la sierra, por aguas vertientes “.
Alfonso X concede el Castillo y la Villa de Salvaleón, a la Orden de Alcántara en Sevilla el 22 de Enero de 1253, y Pedro Yáñez 7º Maestre de la Orden, forma la Encomienda de Salvaleón y concede fueros y cartas pueblas a sus moradores el 16 de Octubre de 1253 en Alcántara.
Con el paso del tiempo, los pueblos de Navasfrías, Genestosa, Valverde y Cilleros estarían integrados en esta Encomienda.
Según parece, Navasfrías pasaría a la Encomienda de Salvaleón con posterioridad a 1362, ya que en 1298 es Comendador de Navasfrías Frey Pedro Muñiz, y en 1362 Frey Pedro Yáñez; posiblemente La Genestosa seria de la Encomienda de Navasfrías, incorporándose las dos al mismo tiempo a la Encomienda de Salvaleón.
D. Esteban Fernández y Dª. Aldonza Rodríguez, su mujer, hacen donación al Maestre D. García Fernández y al Convento de la Orden de Alcántara, del Lugar de la Genestosa, otorgándoles carta de propiedad en Córdoba el día catorce del mes de Julio de 1282. “Á los que aquí son y serán de aquí adelante, todo cuanto heredamiento nos habemos en la Genestrosa y en su término, con casas, y viñas y huertas, é dehesas, é montes, fuentes, heredamientos, aguas, pastos, vasallos y con todos cuantos derechos nos hi habemos y debemos haber. Son testigos los escribanos públicos de Córdoba Alfonso Muñiz y Fernán Roiz. Tiene su asiento este Lugar á la raya del Reyno de Portugal, cuatro leguas de Ciudad Rodrigo” (la distancia en realidad sobrepasa las siete leguas). Estuvo poblado hasta los años 1409. Era de la Encomienda de Salvaleón hoy de la Magdalena.
El Lugar de la Genestosa figura en un documento de 1389 como mansión de la Catedral de Ciudad Rodrigo, desapareciendo en el año 1409 por las continuas rapiñas de que eran objeto sus moradores por parte de los portugueses, desplazándose la mayor parte de ellos al pueblo cercano de Alberguería de Argañan.
El día 12/06/1294, el obispo de Coria D. Alfonso, pronuncia sentencia de excomunión contra algunos comendadores y freyres de la orden de Alcántara, entre ellos, los comendadores de Ceclavin, La Moraleja y Navasfrías, por haber dado orden de matar ó haber matado a los recaudadores del diezmo del obispado.
Este mismo día se firma una concordia, estando entre los testigos Pedro Muñiz comendador de Navasfrías.
Fernando IV, hace donación de las Eljas, aldea de Coria, perteneciente a la Orden de el Hospital, al Maestre y Orden de Alcántara, con todos sus términos, pobladores, justicia, pechos, fueros y derechos, en Valladolid martes día 13 de Noviembre de 1302.
Después de la unificación de las encomiendas de Salvaleón y Eljas, en el siglo XIV, Navasfrías y el resto de pueblos de la encomienda de Salvaleón pasan a pertenecer a la encomienda de Eljas.
Por la concordia entre el Obispado de Coria y el Maestre de Alcántara, en 1231, se fijan las posesiones de la Orden en la Sierra de Gata, hecho que es ratificado en el mes de junio del año 1235 por Gregorio IX, reconociendo como posesiones de la Orden de Alcántara la iglesia de San Juan y la villa de Navasfrías, entre otras.
El mantenimiento de las filas de las órdenes religiosas, viene dado como consecuencia de la incorporación de la nobleza a la disciplina de los monasterios, en tiempos donde las cruzadas y las guerras santas ocupaban la mayor parte de la vida de estos monjes guerreros, los cuales tenían que superar ciertas pruebas para su admisión como religiosos de dichas órdenes.
Juan de Grijota de Santibáñez García y de Quijano, natural de la Villa de Navas frías, es sometido a dichas pruebas para su ingreso como religioso en la Orden de Alcántara, en 1561, exp. – 240.



Nacimiento de la Mesta, y del Honrado Concejo de la Mesta.


Entre los años 1260 -1265, se produce el nacimiento de la Mesta, asociación ganadera de pastores en principio de tipo fronterizo. Su origen es la etapa de lucha contra los musulmanes, cimentado en una disposición que prohibía el cercado de tierras, incluso las cultivadas, como medida para defender los rebaños, desplazándolos rápidamente ante cualquier ataque musulmán o portugués.


Alfonso X, ante la creciente demanda de lana de los mercados extranjeros, amplia los privilegios de la mesta, en Gualda, el día 2 de Septiembre de 1273, con el libre paso por las cañadas, sin restricciones ni en los abrevaderos, ni en las tierras cultivadas, certificando con este y otros privilegios el nacimiento del Honrado Concejo de la Mesta. Esta medida unida a los privilegios de las órdenes militares, tendría graves consecuencias para el desarrollo de Extremadura y envolvería en la pobreza a la mayor parte de sus habitantes. Navasfrías aún formaría parte durante muchos años del territorio de la alta Extremadura.
Las vías pecuarias, formadas por cañadas, cordeles y veredas, están determinadas por su amplitud, la cañada con 75 m., el cordel con 37,5 m. y la vereda con 20 m., forman una tupida red de caminos que cruzan la península por todas partes; la mayoría de estos caminos transcurren a través de las antiguas vías romanas, formando parte de esta maraña de caminos, los abrevaderos, los descansaderos y las majadas, lugares donde dar descanso al ganado y a sus pastores.
Las principales cañadas que cruzan la península dirección norte-sur, son la Cañada Zamorana o de la Vizana, la Cañada Real Leonesa, la Cañada Segoviana y la Cañada Soriana.
Una de estas cañadas procedente de la Vizana y de las otras vías cuyo nexo de unión es la capital charra, parte de esta con dirección a Ciudad Rodrigo, El Bodón, Fuenteguinaldo, Peñaparda, Perosin y la ladera de Jálama, bajando hacia Extremadura por el Puerto de Perales (A partir de El Bodón su itinerario es conocido como el cordel de las merinas); otros ramales o caminos ganaderos lo unían con los pueblos situados en la sierra. Uno de estos trayectos que recibe el nombre de “La Cañada”, unen por Payo y a través la zona de la Genestosa, el término de Navasfrías.


Separación del concejo de Sabugal de la corona de Castilla.


Los infantes de la Cerda, en el año 1295, ayudados por el rey de Portugal Don Dinís, tratan de obtener la corona de Castilla luchando contra el monarca castellano Fernando IV menor de edad, que es apoyado por la orden alcantarina, pero no pueden evitar que el rey portugués se apodere de la Riba Côa, concejo de Sabugal, quedando Navasfrías en terreno castellano leones, dentro de la alta Extremadura.
Doña María de Molina, regenta de Castilla, firma el tratado de Alcañices en el año 1297, renunciando a los terrenos conquistados por el rey de Portugal Don Dinís.
La búsqueda del fortalecimiento de la frontera, por parte de los portugueses, trae consigo la fundación de varios pueblos en el concejo de Sabugal, dando lugar a la formación de núcleos de población donde cobran importancia los “coutos de homiciados”, siendo Alfaiates uno de los más importantes.
La paz en la frontera extremeña duraría pocos años, ya que en1325, al cumplir la mayoría de edad Alfonso XI rey de Castilla, Don Juan Núñez de Lara se subleva contra el rey.
Alfonso IV de Portugal, rompe la paz y empuña las armas en apoyo de D. Juan, atacando Badajoz, pero rápidamente Alfonso XI, hace convocatoria a los concejos de Sevilla, Cáceres, Trujillo, Plasencia y Coria, al mismo tiempo que al Maestre de Alcántara D. Ruy Pérez, el cual juntamente con andaluces y extremeños acaudillados por D. Enrique Enríquez, D. Juan Alonso de Guzmán y D. Alvar Pérez de Guzmán derrotan en Barcarrota a los portugueses que estaban bajo el mando de Don Pedro Alfonso de Sosa, obligando al Rey portugués a levantar el cerco.
En los años posteriores, siguen las disputas entre castellanos y portugueses.
A la muerte del rey portugués Fernando I, el trono es reclamado por Juan I de Castilla a favor de su esposa Beatriz, hija del rey de Portugal, pero el maestre de la orden militar de Avís se proclama rey de Portugal con el nombre de Juan I, y aunque los castellanos habían puesto sitio a Lisboa son derrotados por los portugueses en Aljubarota en 1385.
En 1407, el rey castellanoleonés Juan II, confirma el trazado de la frontera ante la reclamación de las villas de Navasfrías, Genestosa y Valverde del Fresno por el rey portugués Juan I el Grande.
A pesar de la pertenencia del concejo de Sabugal a la corona portuguesa desde 1297, 45 pueblos de este concejo siguen perteneciendo a la diócesis de Ciudad Rodrigo hasta el cisma de occidente, abierto a la muerte de Gregorio XI en 1378 y finalizado con la elección de Martín V en 1417.
Ante la reclamación del Obispo Civitatense, Sixto IV confirma en bula papal el 21/06/1481, la escisión de los pueblos del concejo de Sabugal, de la diócesis de Ciudad Rodrigo.


Privilegios Feudales.



Por la debilidad real durante el reinado de Enrique IV, algunas villas realengas se convierten en señoríos al ser donadas a los nobles en pago de los servicios prestados, pero las continuas disputas entre ellos, hace de esta zona un lugar inseguro.
El más destacado por su belicosidad, es Hernán Centeno, hermano de Francisco Centeno, alcaide de la fortaleza de Trevejo y de Alonso Centeno, Señor de Peñaparda, el cual se hace con el castillo de Rapapelo, en plena sierra, en el lugar denominado las torres a 1270m de altitud, punto estratégico desde donde se domina el valle de Jálama en las zonas de San Martín de Trebejo, Navasfrías, y El Payo.


De sus continuas fechorías y también las de sus familiares, tenemos constancia documental por las cartas de los Reyes y el Consejo ante los desafueros y tropelías cometidos en toda la comarca.
Seguro a Alfonso Suárez de Toledo y familia, vecinos de San Martín de Trevejo, defendiéndole de Fernando Centeno alcaide de la fortaleza de Eljas.- Reyes 20/01/1480.
Seguro a la villa de San Martín de Trevejo defendiéndola contra Fernando Centeno, alcaide de la fortaleza de Eljas y Francisco Centeno, su hermano, que lo es de la de Trevejo.-Reyes 23/02/1480.
Emplazamiento a petición de la villa de San Martín de Trevejo contra Fernando Centeno, alcaide de Eljas y gobernador de la encomienda de Trevejo, por los daños y males que comete contra dicha villa, y por cierto juro que en ella tenía situado Diego del Águila gobernador de Ciudad Rodrigo, que indebidamente cobra dicho alcaide.- Rey 20/03/1480
Iniciativa a las justicias, a petición del lugar de El Sango tierra y jurisdicción de Ciudad Rodrigo, en razón de robos y muertes de que sus vecinos fueron objeto por parte de Fernando Centeno, alcaide de Trevejo, Gutierre de Monroy, alcaide de la Peña de Fray Domingo, Juan de la Plaza y Torres de Valladolid.- Reyes 25/03/1480
Seguro a favor de las villas y lugares de la encomienda de Trevejo defendiéndolas de Fernando Centeno y los suyos, contra quienes combatieron en la fortaleza de Eljas para tomársela.- Reyes 30/05/1480.
Carta para que Fernando Centeno entregue la fortaleza de Eljas, a Jorge Avendaño.- 26/06/1480.
Comisión al alcalde de la fortaleza de Eljas sobre los bienes que fueron robados a Mari Fernández de Valverde, por Fernando y Bernal Centeno.- Consejo 13/12/1480
Comisión para que sea guardado el asiento-cuyos términos se expresan-concertado entre Fernando Centeno y sus parientes, y Diego del Águila y los suyos, así en razón de la muerte de un hijo de dicho Diego-que es comendador también llamado Diego- de que se acusa a los dichos Fernando Centeno y los suyos, como sobre la posesión de la fortaleza de las Eljas.- Reina 15/12/1480 Medina del Campo.
Los Reyes Católicos restablecen el orden y perdonan sus fechorías en 1480.
Parece ser, que después de todo esto, su retirada a la villa de Acebo estuvo rodeada de buenas obras y de un sincero arrepentimiento.
Uno de sus descendientes probaría como caballero de San Juan.
Expediente de pruebas para la concesión del título de caballero de la Orden de San Juan de Jerusalén a Francisco Centeno Pecellin de Paz y Maldonado, natural de Ciudad Rodrigo.
Abuelos paternos Fernán Centeno y Constanza de Paz. 1581.
En el mismo año de 1480, los Reyes reafirman los privilegios del Honrado Concejo de la Mesta:
Real Cedula de 1480 que prohíbe el cercado de las tierras comunales.
Unos años más tarde: Ordenanza de 1489 que modifica las lindes de las cañadas.
Ley de arrendamiento de tierras, autorizando a los ganaderos de la Organización, el usufructo de las tierras ocupadas por sus rebaños, percibiendo a cambio el impuesto de servicio y de montazgo; la parte más cuantiosa de ingresos de la Corona.

2 comentarios:

  1. Me ha dado una gran alegría descubrir tu blog. Me parece extraordinario. Sospecho que eres C. pero no estoy seguro.
    Un saludo, Julián.

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    1. Hola de nuevo Julián! Gracias por la valoración que haces de mi blog.
      Siempre me ha parecido interesante todo lo relacionado con nuestra tierra y de cómo llego a formarse esta pequeña villa y también de cómo nuestros antepasados, unos antes y otros después, con su esfuerzo, llegaron a formar un lugar tan acogedor, en una tierra dura, con la dificultad añadida de los conflictos de la frontera, que si bien, en un principio fue un obstáculo, después fue clave para el crecimiento de la población sobre todo en el siglo XVIII.
      Veo por tu blog, que sigues con interés lo relacionado con los restos de las viviendas situadas a lo largo del regato de las guadañas, algunas en periodo de excavación para su estudio.
      Recuerdo que hace unos años, antes de que nadie se interesase por este tema, ya me comentaste la existencia de ruinas en la zona.
      Tengo que decirte que no soy C, soy P. Paíno.
      Ya tendremos ocasión de hablar.
      Saludos cordiales.

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